AquaChile, el mayor productor de salmón de Chile y el segundo más grande del mundo, suministra alimentos a más de 150 millones de personas alrededor del mundo cada mes. Muchas de las instalaciones de AquaChile se encuentran en zonas remotas del sur de Chile, donde garantizar una conexión a Internet estable y de alta velocidad ha sido siempre un desafío.

Antes de Starlink, AquaChile dependía de la tecnología de satélites geoestacionarios (GEO) para la conexión a Internet, con una velocidad media de 2 Mb/s tanto para la carga como para la descarga, y una latencia de alrededor de 1000 ms. Esto hacía “prácticamente imposible realizar videoconferencias, transmitir video desde cámaras de seguridad y [operar] otras tecnologías que requerían mayores anchos de banda”. Además, su equipo GEO era muy sensible a las condiciones del agua y sus alrededores, lo que provocaba “problemas de conectividad constantes”.

Las operaciones en expansión de AquaChile requerían una conexión a internet confiable, pero su tecnología GEO existente impedía la productividad y el crecimiento. Los constantes problemas de conectividad afectaban las funciones básicas y la eficiencia en varias instalaciones.

Hasta la fecha, AquaChile ha implementado Starlink en 80 instalaciones. Con velocidades promedio de 220 Mb/s de descarga y 24 Mb/s de carga, y una latencia reducida a ~40 ms, las instalaciones remotas de AquaChile ahora pueden mantener canales de comunicación confiables y operaciones comerciales más eficientes. La implementación de Starlink permitió videoconferencias en vivo, llamadas VoIP, videovigilancia en tiempo real y transmisión sin interrupciones de datos desde sensores y dispositivos IoT.>

Con Starlink, los empleados y socios comerciales de AquaChile pueden “comunicarse con sus seres queridos, acceder a la telemedicina y visitar redes sociales y servicios de entretenimiento”.

Más allá de sus lugares de trabajo, AquaChile ha implementado Starlink en regiones vecinas como Puerto Eden y escuelas rurales en las regiones de Aysén, brindando internet gratuito a comunidades que antes no tenían conexión.

De hecho, la comunidad de Puerto Eden, hogar de 80 chilenos del pueblo indígena Kawésqar, es una de las comunidades más aisladas del mundo. Antes de la llegada de Starlink, el contacto con el mundo exterior solo era posible a través de un viaje en barco de varias horas. Ahora Starlink les ha dado una “ventana al mundo”, donde pueden acceder a la telemedicina, oportunidades educativas y conectarse con familiares que viven lejos.

“En AquaChile, el uso de la tecnología Starlink mejoró de forma significativa nuestras operaciones en sectores geográficamente dispersos en la parte sur de Chile. Muchos de estos sectores se encuentran en las zonas más remotas no solo de Chile, sino también del mundo”.